Muchos de nosotros estamos familiarizados con las comorbilidades que pueden coexistir con nuestro cerebro con TDAH. Un ejemplo: entendemos que algunas personas con TDAH pueden experimentar dificultades para aprender cosas nuevas. 😵
Las luchas que algunos niños con TDAH no diagnosticado experimentan con el estudio y la mejora de sus capacidades de pensamiento pueden ser malinterpretadas como pereza o no poner el esfuerzo para concentrarse. Da un paso atrás y recuerda tus días en el colegio. Puede que haya habido momentos en los que los profesores hayan considerado que tu comportamiento era perturbador o que no seguías las instrucciones.
Un TDAH no diagnosticado puede allanar el camino a la confusión y la frustración. Al fin y al cabo, a muchos de nosotros nos cuesta entender por qué nos cuesta tanto aprender.
Momentos como éste, en los que experimentamos confusión y frustración, no resuelven los problemas subyacentes. Al contrario, complican aún más nuestras dificultades. Según las estadísticas, entre el 30 y el 50% de la población de personas con TDAH tiende a tener dificultades para aprender. 😭 Lo que es aún más preocupante es que estos estudiantes pueden no estar recibiendo el apoyo adecuado y razonable o soluciones a sus luchas. La cuestión es que el riesgo de tener dificultades de aprendizaje puede surgir si no abordamos la situación de forma proactiva.
Las dificultades de aprendizaje parecen producirse cuando el rendimiento académico de un alumno es significativamente inferior al esperado para su edad y sus capacidades intelectuales. Los retos a los que nos enfrentamos en el aprendizaje pueden ser diferentes entre sí. Puede ser en lectura, escritura, matemáticas o cualquier otra asignatura. Si experimentas alguna de estas dificultades, debes consultar a un profesional para que te examine.
Existen diferentes tipos de dificultades de aprendizaje que una persona puede experimentar, y una de las más comunes es la Dislexia. Conozcamos más sobre este problema de aprendizaje más común que puede experimentar una persona con TDAH.
El TDAH y la dislexia son trastornos distintos que pueden solaparse. De ahí que sea frecuente confundir la naturaleza de estas dos afecciones. Se trata de dos trastornos neurodivergentes diferentes que pueden coexistir entre sí, pero que no necesariamente provocan la aparición de cada uno de ellos. La dislexia y el TDAH pueden distinguirse entre sí en función de los síntomas, la función cerebral y los patrones de herencia.
La dislexia es un trastorno específico del aprendizaje de origen neurológico. Se caracteriza por deficiencias en la capacidad de procesar el lenguaje escrito o hablado. 🥺 La dislexia se presenta en individuos, especialmente niños, cuando aún están aprendiendo a leer. 📚 Suelen tener dificultades para leer en voz alta y también pueden presentar un reconocimiento inexacto de las palabras y una fluidez lectora lenta o deficiente.
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, por su parte, es un trastorno del neurodesarrollo que a veces comienza en la infancia y puede persistir hasta la adolescencia y la edad adulta. Se caracteriza por síntomas de falta de atención, impulsividad, e hiperactividad. Uno de los síntomas más comunes del TDAH que puede manifestarse en una persona es la distracción, que dificulta la concentración en una tarea o actividad. 😵
Según las recientes estadísticas de la Asociación Internacional de Dislexia, por cada diez niños diagnosticados de Dislexia, tres de ellos pueden tener tambien TDAH. Conozcamos más sobre las particularidades de tener este problema de aprendizaje en relación con el TDAH.
La dislexia y el TDAH no están a salvo de tener estereotipos, ya que la población general puede no entenderlos completamente. Puede haber casos en los que estas generalizaciones apresuradas se conviertan en la única definición de estos trastornos neurodivergentes, lo que puede invalidar las experiencias de otros alumnos disléxicos o de otras personas con TDAH. He aquí algunas de las ideas erróneas más comunes sobre los niños con dislexia:
Se les puede malinterpretar fácilmente como "vagos" porque puede que no sean capaces de terminar su trabajo tan rápido como los demás o que necesiten más tiempo para compensar su problema de aprendizaje. Por el contrario, los disléxicos suelen esforzarse más que sus compañeros para completar las tareas escolares.
La verdad es que la inteligencia no tiene nada que ver con la dislexia. Muchos individuos con dislexia son considerados "superdotados" debido a sus altos niveles de CI. ❤️ Algunas de las personas más famosas con dislexia son Steve Jobs, Albert Einstein y Oprah Winfrey.
Este puede ser uno de los conceptos erróneos más dañinos e hirientes sobre la dislexia. La dislexia no tiene nada que ver con cómo se ha criado a un niño o con el tipo de entorno en el que ha crecido. Es un trastorno neurológico causado por una diferencia en la forma en que el cerebro procesa la información. Sin embargo, la dislexia puede provenir de un progenitor disléxico porque puede transmitirse genéticamente.
Este es un error muy común porque muchos creen que la dislexia significa leer las letras y las palabras al revés. Sin embargo, la dislexia no significa necesariamente que un individuo lea letras o palabras al revés. 📝Simplemente hay una diferencia en la forma en que el cerebro procesa la información.
Además, no olvides que hay varios tipos de dislexia, y algunos de ellos tienen que ver con los sonidos y los números.
Conocer estos conceptos erróneos sobre la dislexia puede ayudar a detener la difusión de información falsa y crear una sociedad más inclusiva para las personas con este problema de aprendizaje específico.
El TDAH y la dislexia pueden ser una verdadera lucha para las personas afectadas por ellos, así que dejemos de añadir sal a la herida y démosles la oportunidad de demostrar que, aunque tienen una forma diferente de pensar, vivir y procesar la información, ¡pueden hacerlo igual de bien que el resto! 💪
La dislexia del desarrollo, o dislexia en términos más sencillos, es un trastorno neurológico caracterizado por la dificultad para procesar el lenguaje -tanto escrito como hablado- a pesar de tener una inteligencia media y oportunidades adecuadas para aprender.
Se cree que está causada por una diferencia en la forma en que el cerebro procesa la información. Hay varios síntomas de la dislexia, pero el más común es la dificultad para leer. 📚 Esto puede manifestarse de varias maneras, como tardar más en leer, cometer más errores al leer o tener dificultades para comprender lo que han leído.
Sin embargo, tener Dislexia no acaba ahí. También se puede experimentar con lo siguiente:
En ocasiones, la dislexia evolutiva tiene su origen en distintos factores, pero el más conocido es la genética. Puede transmitirse de padres disléxicos a hijos o ser un rasgo heredado de antepasados. Sin embargo, aún se desconoce la causa fundamental de padecerla. Existen diferentes teorías sobre cómo se desarrolla este trastorno neurológico, pero se necesita más investigación para tener una respuesta sólida.
Aunque muchos artículos abordan la dislexia en Internet, aún queda mucho por aprender sobre este trastorno del aprendizaje basado en el lenguaje. Lo mismo ocurre con el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad. Estos dos trastornos neurológicos tienen mucho en común y ya es hora de que hablemos de sus diferencias.
Hay una gran diferencia entre el diagnóstico del TDAH y el de la dislexia. El TDAH se diagnostica utilizando el DSM-5 o Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales. En cambio, la dislexia se diagnostica teniendo en cuenta los antecedentes familiares del individuo, sus capacidades cognitivas, sus logros académicos y otras habilidades lingüísticas.
Para tener un diagnóstico de TDAH, el asesoramiento médico profesional debe basarse en sus experiencias en cuanto a dificultad para prestar atención, memoria de trabajo o luchas en el funcionamiento ejecutivo. Por otro lado, la dislexia se diagnostica evaluando sus habilidades de lectura y escritura, así como la forma en que su cerebro procesa la información.
El TDAH y la dislexia pueden coexistir, lo que significa tener ambos trastornos simultáneamente. Sin embargo, no siempre es así, ya que algunas personas sólo padecen uno u otro. Tener TDAH y dislexia a la vez puede ser difícil de sobrellevar. Sin embargo, con el apoyo y la comprensión adecuados, sabrás cómo manejar con éxito tanto el TDAH como la dislexia.
Mucha gente piensa que la dislexia consiste en tener dificultades para leer. Por otro lado, muchos ven el TDAH como una condición que hace que una persona esté "exaltada" y no se canse debido a su suministro ilimitado de energía. 🙌 Por muy diferentes que sean estos dos trastornos, presentan síntomas similares que pueden dificultar su diagnóstico.
Una de las confusiones entre el TDAH y la dislexia se refiere a la lectura. Otras personas pueden pensar que su discapacidad lectora puede estar causada por un TDAH no diagnosticado, principalmente por falta de atención, problemas para concentrarse y una función ejecutiva "defectuosa". Por otro lado, los afectados por dislexia pueden pensar que se les reconoce como tales porque tienen dificultades para mantener el esfuerzo mental, luchan con la conciencia fonémica o tienen problemas de aprendizaje.
Otro síntoma coincidente de estos dos trastornos puede girar en torno a la autoestima. Las personas con TDAH a menudo tienden a tener baja autoestima porque pueden burlarse de ellos por su comportamiento hiperactivo o les dicen que no pueden concentrarse en nada. 😭 Por otro lado, los individuos con dislexia pueden experimentar lo mismo debido a la forma en que procesan el lenguaje. Durante las actividades de clase que requieren lectura o escritura, es posible que se les deje de lado y que sientan que no son lo suficientemente buenos.
Los pacientes con dislexia o TDAH pueden cometer errores. Los síntomas de ambas afecciones pueden dar lugar a errores frecuentes. Además, olvidarse de las cosas que se leen a veces puede ser un síntoma superpuesto y puede resultar bastante confuso para los revisores médicos determinar si se tiene TDAH o dislexia.
No es fácil padecer ninguno de estos trastornos, y mucho menos los dos. La mejor manera de afrontarlos es recibir primero un diagnóstico para recibir inmediatamente el tratamiento adecuado y las adaptaciones que necesitas. Después de todo, conocer tus dificultades puede ayudarte a entenderte mejor y a crear un plan para afrontar mejor tu enfermedad.
Según las últimas investigaciones basadas en pruebas, hasta el 50% de la población con TDAH puede padecer también una enfermedad crónica relacionada con el aprendizaje. Una de las comorbilidades relacionadas con el TDAH es la dislexia. Si tiendes a luchar o sientes que estás luchando tanto con el TDAH como con la dislexia, es crucial que cuentes con el apoyo adecuado para el TDAH.
Estos son algunos consejos que puedes seguir para aliviar tus dificultades:
Aunque tener TDAH y dislexia puede ser duro, no pierdas la esperanza. ❤️ Con comprensión, apoyo y esfuerzo, podrás controlar tus síntomas y alcanzar el éxito en tus esfuerzos. Recuerda que estas luchas no te definen como persona y que sigues siendo capaz de alcanzar tus metas. Busca ayuda cuando la necesites y ten siempre presente que no estás solo en esta lucha.
¿Es frecuente que las personas con TDAH tengan dificultades de aprendizaje?
Es bastante frecuente. Según algunos informes, hasta el 50% de las personas que padecen TDAH también tienen dificultades de aprendizaje, como la dislexia.
¿Cuál es la diferencia entre el TDAH y la dislexia?
El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que afecta a la capacidad de una persona para prestar atención, decidir, organizar, recordar y permanecer quieta. Muchas personas con TDAH pueden distraerse fácilmente, ser impulsivas o "exaltadas". Por otro lado, la dislexia afecta a la capacidad de la persona para procesar el lenguaje escrito y hablado. Pueden tener dificultades para leer o escribir.
¿Es posible gestionar con éxito el TDAH y la dislexia al mismo tiempo?
¡Sí! Tener tanto TDAH como dislexia puede ser un desafío adicional, pero con el diagnóstico, el tratamiento y el apoyo adecuados, ¡puedes vivir tu mejor vida mientras tienes estas dos afecciones!